El sistema de microfiltración sobre tarja tiene un filtro que en su interior se encuentra una malla de 1 micrón, luego el carbón activado con la cantidad suficiente para reducir olores, químicos, gases, sedimento, partículas suspendidas, en concentraciones bajas o medias. Este tipo de filtración es el más utilizado en el mundo y es recomendado en ciudades en donde el agua no tiene un alto grado de salinidad, metales pesados o que tenga una muy alta concentración de cloro y tierra. El purificador tiene una calidad excelente que incluso puede durar de 12 a 14 meses dependiendo del agua de la ciudad y de su domicilio. El cartucho de carbón activado viene de Estados Unidos y los vasos están hechos de plástico de polipropileno lo que los hace resistente a los impactos, químicos y a la temperatura. Tiene una válvula que se enrosca en su llave mezcladora y puede desviar el agua para que entre en el purificador y salga por su garza.